En nuestra receta hemos mezclado un poco de perejil con el pan rallado mediante un molinillo de café, de forma que nos queda una pan rallado con una tonalidad algo verdosa, aunque si no tienes molinillo puedes trocear y repartir generosamente el perejil por encima.
Una vez que tenemos listos los ingredientes, repartimos los trocitos de ajo picado por encima de todos los gambones,

seguidamente ponemos algo de sal al gusto por encima, luego rociamos con generosidad hasta casi ocultarlos (véase imagen arriba) el pan rallado y perejil, finalmente rociamos y repartimos el aceite con la ayuda de una aceitera o cuchara sopera.
Mientras preparamos nuestra bandeja, habremos precalentado el horno de forma que antes de introducir la bandeja hayamos alcanzado temperatura de 200 aproximadamente, es importante que el horno estĂ© muy caliente de forma que el tiempo de cocinado sea mĂnimo a muy alta temperatura, de esta forma conseguiremos que el gambon no se nos reseque.Â